Encaramado en una montaña a más de 750 metros sobre el nivel del mar, el castillo de Haut Koenigsbourg domina todo el valle. Este inmenso castillo fortificado es un auténtico emblema en Alsacia, testigo de los largos periodos de guerra que han salpicado esta región desde el siglo XII.
Como muchas regiones francesas, el Gran Este ha estado marcado por la guerra. En la región de Colmar, numerosos vestigios de castillos fortificados están hoy abiertos al público. Estas visitas le sumergirán en la fascinante historia de esta región. Poderosos, fascinantes, impresionantes... los castillos fortificados de Alsacia le sumergirán en el corazón de la historia y le sorprenderán por su alma y su encanto. Además de su interés histórico, estos centinelas de piedra ofrecen unas vistas extraordinarias de los alrededores: pequeños pueblos medievales, viñedos, montañas, bosques... Cerca de Colmar podrá visitar numerosos castillos de gran belleza. Para ayudarle a elegir, aquí tiene una selección de nuestros tres castillos favoritos en un radio de apenas 30 km: Château du Haut Koenigsbourg, Château du Hohlandsbourg y Château de Saint-Ulrich.
El más conocido: el castillo de Haut Koenigsbourg
Cuando visite la región de Colmar, le recomendamos encarecidamente que visite el castillo de Haut Koenigsbourg, a menos de 30 km de Colmar. En nuestra opinión, es una visita obligada por su excepcionalidad. Desde allí arriba, el magnífico panorama de los alrededores bien merece las distracciones: ¡la gran llanura de Alsacia, los Vosgos y la Selva Negra se extienden a sus pies!
Construido en arenisca roja de los Vosgos, el castillo también tiene un aire majestuoso. Muy bien conservado gracias a recientes restauraciones, nos transporta a otra época. Para los amantes de la historia, no dude en optar por una visita guiada del castillo y sus fortificaciones.
Información práctica
⏰ Horarios de apertura
Los lunes, el castillo abre a las 10.30 h. Todo el año excepto 01/01, 01/05 y 25/12 - detalles en el sitio web.
👛 Precios
Adultos 9€ / Niños 5€ / Gratuito para menores de 6 años. Entrada gratuita el1er
domingo de cada mes de noviembre a marzo y durante las Jornadas del Patrimonio.
Le recomendamos encarecidamente que reserve en línea en temporada alta.
Castillo de Hohlandsbourg, en la ruta del vino.
A sólo 12 km de Colmar, el castillo de Hohlandsbourg puede no estar tan bien conservado como su hermano mayor Haut Koenigsbourg, pero también tiene mucho que ofrecer. Situado a 620 metros sobre el nivel del mar, el castillo ofrece impresionantes vistas panorámicas de la Selva Negra, la llanura alsaciana y los Vosgos.
La gran ventaja de este castillo es que resulta muy divertido visitarlo. A diferencia de muchos castillos, no descubrirá muebles antiguos ni salas decoradas sin vida... En el Château du Hohlandsbourg, la visita escenográfica es divertida e interactiva, y le ayudará a comprender la historia, la organización y el lugar del castillo desde la Edad de Bronce hasta nuestros días. El espacio está diseñado y acondicionado para acoger eventos, actividades culturales y otros espectáculos en vivo.
Este importante patrimonio se ha convertido en un lugar para disfrutar y descubrir en familia: visitas autoguiadas o guiadas, exposiciones, talleres, fiestas de cumpleaños, recreaciones históricas, banquetes medievales, etc. La zona museística, por su parte, ofrece una forma divertida de descubrir cómo se vivía en la Edad Media. Es un cambio refrescante con respecto a las visitas guiadas tradicionales, ¡y seguro que encantará a los niños!
Información práctica
👛 Precio completo 7 € / con descuento 4,5 € / gratis para menores de 6 años
👉 Servicios in situ: restauración, alquiler de espacios, tienda.
Abierto del primer sábado de abril al segundo domingo de noviembre.
Castillo de Saint-Ulrich
Situado a unos 20 km de Colmar, el castillo Saint-Ulrich es uno de los tres castillos fortificados de Ribeauvillé y el mejor conservado. También conocido como Rappolstein, Gross Rappolstein o Ukrichsburg, el castillo fue construido a mediados del siglo XIII sobre un espolón rocoso a 530 metros sobre el nivel del mar, dominando el valle del Strengbach.
Aunque Saint-Ulrich tiene poca importancia militar, sigue siendo un interesante ejemplo de vivienda señorial. Fue la residencia de la poderosa y rica familia Ribeaupierre hasta el siglo XV. Con el paso del tiempo, se introdujeron en el castillo varias mejoras que dieron lugar a una mezcla de diferentes estilos arquitectónicos, con elementos románicos, góticos e incluso renacentistas. En el siglo XVI, el castillo de Saint-Ulrich fue abandonado y empezó a arruinarse. En el siglo XVII se incendió.
Hoy en día, este castillo, aunque en ruinas, sigue siendo tan imponente e impresionante como siempre. Los vestigios que pueden verse hoy datan de varias épocas. En particular, se puede ver la torre del homenaje cuadrada y el edificio principal que datan del siglo XII, la sala de los caballeros y la gran torre residencial que datan del siglo XIII, la barbacana de entrada y la muralla exterior que datan del siglo XIV, y la capilla Saint-Ulrich que data del siglo XV.
Información práctica
El acceso al castillo es gratuito. Solo se puede llegar a pie a través de la ruta de senderismo señalizada "Circuit des trois châteaux" siguiendo el GR5 (salida desde la Place de la République o desde el aparcamiento de Lutzelbach en Ribeauvillé, duración aprox. 2 horas y media).