Granville es una estación balnearia muy conocida por los turistas. Su península y su casino le han valido el sobrenombre del "Mónaco del Norte". La ciudad está situada en la bahía del Mont-Saint-Michel, un lugar ideal para aprovechar al máximo las mareas altas. En la bahía se producen las mareas más altas de Europa.
Esta ciudad fortificada, construida sobre un promontorio rocoso, cuenta con una gran ventaja en marea alta: las islas Chausey. El archipiélago cuenta con numerosas playas de arena blanca bañadas por aguas translúcidas. Cuesta creer que este pedacito de paraíso, que parece una isla tropical, se encuentre en realidad en Normandía. A la isla más grande se llega en 45 minutos desde Granville. Desde el archipiélago, el espectáculo de las mareas altas es impresionante. En el programa: pesca a pie con marea baja y senderismo o deportes de tabla con marea alta.