El Château des Ducs de Bretagne, una joya histórica en el corazón de la ciudad.

Nacimiento

La construcción del castillo de Nantes comenzó en el siglo XIV. Lo único que queda de esta época es la torre conocida como Vieux Donjon, y en aquella época la ciudad de Nantes estaba formada por lo que hoy es el barrio de Bouffay. En 1466, Francisco II de Bretaña decidió reconstruir el castillo y levantó las imponentes murallas, que más tarde fueron reforzadas por su hija Ana de Bretaña, dos veces reina de Francia por sus sucesivos matrimonios con Carlos VIII y Luis XII. Durante el mismo periodo, se construyó en su interior un palacio residencial de toba blanca (Le Grand Gouvernement, reconstruido bajo Luis XIV, el Grand Logis y la Tour de la Couronne d'Or), seguido de un segundo palacio más pequeño de estilo renacentista (Le Petit Gouvernement). Su refinamiento contrasta con las murallas y refleja el papel defensivo y de prestigio que desempeñó el castillo a partir de esta época.

Decadencia

En 1532, con la unión de Bretaña con Francia, el edificio pasó a ser propiedad real y luego residencia bretona de los reyes de Francia a lo largo de los siglos XVI y XVII. En 1582, durante las Guerras de Religión, se mejoraron las murallas para albergar cañones. A partir de entonces, el castillo fue perdiendo su aspecto soberbio, convirtiéndose en prisión, cuartel y luego arsenal. La explosión de la Torre de España en 1800 causó grandes daños a la catedral y provocó la destrucción de la capilla y de los archivos del castillo. Clasificado como monumento histórico en 1862, fue vendido por el Estado a la ciudad de Nantes en 1915, antes de convertirse en museo municipal en 1924. Durante la Segunda Guerra Mundial, las tropas de ocupación alemanas se instalaron y construyeron un búnker en el patio.

De vuelta a la majestuosidad:

A principios de los años 90, se iniciaron importantes obras de renovación para devolver al castillo su antiguo esplendor. Los primeros proyectos fueron la restauración de la Torre de los Jacobinos y de las fachadas del Gran Gobierno (15º/17º) y de la Torre de la Couronne d'Or (15º). El edificio Harnachement distrito 18), rehabilitado en 1997, se dedicó a exposiciones temporales.

En la década de 2000, se restauraron las fachadas de toba blanca del Gran Logis (15º/17º), así como las partes más antiguas y llamativas del edificio, que asemejan el castillo de los Duques de Bretaña a los castillos del Valle del Loira. La residencia ducal también se rehabilitó por completo para albergar el museo.

Sobre todo, ¡dé un paseo! El patio interior, con su elegante residencia ducal de estilo gótico flamígero, está abierto al público, al igual que el jardín del foso, perfecto para un picnic. Pasee por las murallas, también de acceso libre, y admire las vistas de la ciudad mientras se imagina como un caballero de brillante armadura defendiendo su ciudadela.

Tenga en cuenta que no se admiten perros en el interior del castillo, a excepción de los perros guía.

Museo de Historia de Nantes

Si le apasiona la historia y desea conocer todos los secretos de la ciudad, acérquese al Museo de Historia de Nantes, en el Castillo de los Duques. Desde la historia de la construcción del castillo hasta la trata de esclavos en el Atlántico, pasando por las dos guerras mundiales y la industrialización, este museo lúdico e interactivo le hará descubrir los principales acontecimientos históricos de Nantes. El artista nantés Pierrick Sorin también ha contribuido a la exposición con sus creaciones de vídeo.

El museo cuenta con una impresionante colección de objetos heterogéneos y documentos de época que le harán viajar en el tiempo.

Las exposiciones temporales del museo también se centran en diferentes aspectos de la historia y la cultura de Nantes, con la adquisición constante de nuevos objetos que nunca antes se habían expuesto.

A lo largo de los años, los visitantes han podido descubrir Nantaises au travail; Nantais venus d'ailleurs; En guerres, 1914-1918 / 1939-1945, Nantes / Saint-Nazaire; ¡Rock! Una historia de Nantes; LU, un siglo de innovación; L'abîme.Nantes en la trata atlántica y la esclavitudcolonial...

🍴 ¡Imprescindible si visitas el castillo! En medio del patio interior se encuentra la crepería La Fraiseraie, toda una institución en la región del Loira Atlántico. Desde hace 50 años, esta empresa familiar, que en sus orígenes producía fresas, deleita a los habitantes de Pornic con sus helados, famosos en todo el departamento. Tras abrir una heladería en el centro de Nantes, La Fraiseraie se ha trasladado ahora al castillo para una fórmula de Crêperie, acorde con la herencia de los duques de Bretaña. Pero que no cunda el pánico, sus famosos helados siguen en la carta e incluso están presentes en los crêpes. ¿Nuestro consejo de experto? La crêpe Fraiseraie: mermelada, fresas frescas, nata montada y el increíble sorbete de fresa que ha hecho famosa a la heladería.4...