Fisherman's Wharf, para los amantes del mar

Fisherman's Wharf es hoy una de las zonas turísticas más populares de San Francisco, pero en sus orígenes fue un barrio de pescadores. Su historia se remonta al siglo XIX, cuando pescadores italianos emigraron a Estados Unidos en busca de prosperidad. Echaron sus redes en la bahía de San Francisco en una época en la que la ciudad estaba en pleno auge de las minas de oro. La población italiana se asentó y prosperó durante décadas, y sus descendientes siguen pescando aquí hoy en día. No dude en hablar con ellos, ¡le recibirán encantados!

Pier 39 es sin duda uno de los lugares más populares de Fisherman's Wharf, ideal para una excursión en familia. Aquí encontrará de todo, desde restaurantes y tiendas hasta artistas callejeros, un centro comercial y vendedores de marisco. Puede pasar aquí una tarde entera, o sólo unas horas. A lo largo del año se organizan numerosos eventos, como la Roller Disco Party. En verano, los cines al aire libre hacen las delicias de los cinéfilos, y la zona fue escenario de una película de James Bond. Por último, no puede irse del muelle 39 sin ver a los leones marinos que se han instalado en los pantalanes. Toman el sol y no temen a los humanos, pero tenga cuidado de no molestarlos, pues siguen siendo animales salvajes.

Hay muchos buenos restaurantes en la zona, sobre todo alrededor del muelle 45. Aquí podrá disfrutar de una buena comida basada en el mundo marino. Pescado, cangrejo, marisco y toda la pesca del día se sirve en los restaurantes. Una particularidad del barrio es que la mayoría son para llevar, así que una vez comprada la comida se puede seguir paseando por las calles o sentarse frente al puerto. Cabe señalar que parte del muelle resultó dañado en un incendio en mayo de 2020 y que actualmente se están llevando a cabo obras de renovación. Otra actividad posible es el acuario de la bahía, que hará las delicias de todos los niños: una estupenda excursión familiar.

Fisherman's Wharf alberga varios de ellos, empezando por el Museo Ripley's Believe It or Not. Situado cerca del muelle 39, alberga una extraordinaria colección de objetos en más de 17 galerías repartidas en 2 plantas. Abre todos los días de 10.00 a 22.00 y hasta las 23.00 los fines de semana, y la entrada cuesta 23 dólares por persona.

El museo que no hay que perderse es el que sustituyó al museo de cera de la ciudad. Renovado en 2014, Madame Tussaud's es ahora una de las atracciones estrella de San Francisco, con sus muñecos de cera, mejor hechos y de mayor calidad que sus predecesores. La entrada cuesta 25 dólares por persona, y abre todos los días a partir de las 10 de la mañana.

Hay algunas cosas que debe saber para que visitar el distrito le resulte más fácil. San Francisco suele estar plagado de niebla, que suele disiparse hacia el mediodía en verano, pero aun así es aconsejable ir temprano para evitar las aglomeraciones, sobre todo los fines de semana. La niebla vuelve sobre las 16:00, así que planee antes un paseo por los muelles para admirar el puente Golden Gate. Los carteristas deambulan por las calles y detectan a los turistas por su atuendo, así que evite los pantalones cortos y tenga cuidado con sus pertenencias. Puede hacer frío, así que asegúrese de consultar la previsión meteorológica antes de salir, y una chaqueta puede venirle bien.