Para comenzar nuestro viaje a Canadá, llegamos a Toronto. Con sus 3 millones de habitantes, es una ciudad dinámica, de moda y fascinante. Pasamos nuestro primer día deambulando por las calles principales y descubriendo microcervecerías, boutiques de diseño y conceptos innovadores. Estamos asombrados por la energía de esta ciudad.
Por la noche, fuimos a comer a uno de los restaurantes del Distillery District. Los muros de ladrillo y las calles adoquinadas nos dan una cálida bienvenida a esta antigua destilería fundada en 1837 por dos ingleses. Este barrio histórico de Toronto es el corazón del arte y la cultura de la ciudad. La comida aquí es magnífica, y le encantará quedarse un rato y compartir una cerveza negra con los amigos.