El Palacio de los Grandes Maestres, símbolo de la historia de Rodas

Con su peculiar forma de destacar en el casco antiguo de Rodas, el Palacio de los Grandes Maestres es emblemático de la historia de toda la isla desde la llegada de los Caballeros de la Orden de San Juan de Jerusalén. Llegaron a Rodas en 1310, tras haber sido expulsados de Tierra Santa, donde se fundó esta hospitalaria orden durante las Cruzadas.

Como ocurre a menudo en Grecia, el emplazamiento del palacio había estado ocupado desde la Antigüedad, y después durante la época bizantina. Deseoso de protegerse de los ataques exteriores, el Gran Maestre Hélion de Villeneuve hizo ampliar una antigua ciudadela, transformándola en un verdadero palacio fortificado, nuevo centro de poder de la Orden. Esta obra, acompañada de sólidas murallas, demostró su eficacia a lo largo de los dos siglos que los Caballeros de San Juan pasaron en Rodas. En el siglo XVI, la presión otomana era fuerte: en 1522, tras cinco meses de asedio, los Hospitalarios fueron derrotados por el sultán Solimán el Magnífico y abandonaron Rodas para dirigirse a Malta.

El palacio sufrió dos graves reveses durante el periodo otomano: un terremoto en 1851, seguido de una explosión de pólvora cinco años más tarde. De su antiguo esplendor, el Palacio de los Grandes Maestres pasó a un estado ruinoso.

En vísperas de la Primera Guerra Mundial, Rodas y el Dodecaneso pasaron a manos italianas. Más tarde, en 1937, el régimen fascista, que se proclamaba descendiente de los Caballeros de San Juan, decidió renovar el Palacio de los Grandes Maestres, un poco a su gusto... ¡como seguramente notaron los especialistas!

Destinada a convertirse en la residencia de Mussolini, el dictador nunca llegó a Rodas... que, tras todos sus avatares, se reincorporó finalmente a Grecia en 1948.

Sería una pena perderse la visita al Palacio de los Grandes Maestres, aunque hay que reconocer que el lugar carece de paneles explicativos: infórmese de antemano o contrate los servicios de un guía para conocer mejor su historia.

Visitar el Palacio de los Grandes Maestros es más bien pasear de sala en sala y por el patio central, admirando los magníficos frescos y mosaicos ornamentales de la época helenística, trajes de época, muebles, esculturas, etc. En la planta baja, dos pequeñas e interesantes exposiciones recorren la historia antigua de Rodas hasta el Imperio Romano, y luego desde el periodo bizantino hasta la conquista otomana de la isla.

Para completar la visita, no dude en aventurarse por las murallas (entrada de pago), a las que se accede desde el Palacio de los Grandes Maestres: tenga en cuenta que los horarios de apertura no son los mismos. Es un paseo agradable, sobre todo por las impresionantes vistas del casco antiguo de Rodas, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.