El Neustadt, barrio prusiano de Estrasburgo

Organizada en forma de círculo perfecto, esta plaza, antes llamada Kaiserplatz, nació del deseo de fundar una nueva sede política y administrativa. Une el centro de Estrasburgo con la Ciudad Nueva. En el centro de la explanada se extiende un magnífico jardín.

A la izquierda, se encuentra el espléndido Palacio del Rin, construido en 1880 como residencia del Emperador. Imponente y realizado con materiales nobles, el edificio está rematado por una bonita cúpula y cubierto de azulejos tradicionales. Con el tiempo, se destinó a un uso completamente distinto, adquiriendo sus cartas de nobleza al albergar la Comisión Central para la Navegación del Rin, decisión votada por el Tratado de Versalles en 1919.

Por otra parte, la biblioteca nacional y universitaria de Estrasburgo bien merece una visita. Se trata de un espléndido edificio que contiene más de 3 millones de libros y documentos. Esto la convierte en la segunda biblioteca más grande de Francia. Bajo el dominio alemán, se convirtió en la biblioteca regional del Reichsland para Alsacia-Lorena, contribuyendo directamente al prestigio del urbanismo de la época.

Cruce la Place de la République y siga por la inmensa Avenue de la Liberté. Por el camino, pasará junto al Teatro Nacional de Estrasburgo, cuya fachada linda con la avenida Victor Schoelcher. Un poco más adelante, el Hôtel des Postes se alza a la derecha.

Este edificio histórico sigue siendo testigo de la anexión de Alsacia al Imperio alemán. Primero albergó Correos, telégrafos y teléfonos, y después las dos instituciones francesas: La Poste y France Télécom. Fue sede de la primera Bienal de Arte Contemporáneo de Estrasburgo antes de sufrir una profunda remodelación. Recientemente reformado, no necesitaba mucho trabajo, dada su estructura sólida y bien construida.

Justo antes del puente de Auvernia, gire a la derecha por el muelle Koch para admirar la Fuente de las Desilusiones. Enclavada en un montón de piedras, esta fuente es uno de los pequeños secretos de la ciudad. Prácticamente oculta a la vista, hay que rodear la arboleda para llegar a orillas del Ill y seguir el chapoteo del agua.

Al llegar al final del Pont d'Auvergne, un inmenso palacio se alza orgulloso frente a su extremo opuesto, el Palais du Rhin. Este edificio neorrenacentista fue construido para albergar una universidad moderna. Hoy alberga la Universidad de Estrasburgo. Su interior es tan majestuoso como su fachada. Cuenta con una estatua de granito negro de Ramsés II. El complejo se completa con un jardín botánico y un planetario.

Si quiere ir un paso más allá, diríjase a las afueras de la Neustadt, en el Boulevard de la Victoire, que bordea la Ciudad Nueva, para visitar el antiguo Grand bain municipal. Fue inaugurado en 1879 en el marco de una importante política sanitaria. Además de su arquitectura exterior, muy innovadora para su época, el interior es único. Entre ellos destacan materiales lujosos como el mármol y la cerámica, así como guiños a la Antigüedad, el Renacimiento y el estilo barroco. El arquitecto Fritz Beblo concibió los Bains Municipaux como una obra de arte completa.

📍 Localización: al norte de Estrasburgo.

🚌Cómo llegar:

• A pie: a 10 minutos de la catedral de Notre-Dame de Estrasburgo.
• En autobús: línea 72 parada "République".
• En tranvía: líneas B, C o F, parada "République".

Encantador establecimiento con el cálido ambiente de un café vienés, el Café Brant se encuentra en el número 11 de la place de l'Université y debe su nombre al escritor alemán Sébastien Brant. Podrá sentarse en los sillones de terciopelo y disfrutar de una taza de café por la mañana con una rebanada de mermelada, un almuerzo rápido al mediodía o un aperitivo con amigos por la noche.

Pont des Vosges es una de las direcciones de visita obligada de la ciudad. Annie Voegel, que dirige el restaurante con la ayuda de su maître, hace todo lo posible para ofrecer a sus clientes una experiencia única. En la cocina, las estaciones son la principal preocupación del chef Jean-Philippe Schubnel, que sólo utiliza los productos más frescos para sacar lo mejor de sus platos. Su pasión y su fuerte gusto por la tradición alsaciana quedan patentes en sus sugerencias.