De gira por DomQuartier

El punto de partida de una visita al DomQuartier son los salones barrocos de la antigua Residencia. Estas salas, adornadas con tapices flamencos y vasijas de barro, albergan magníficas colecciones de pintura, entre ellas obras de Rubens y Le Brun. En particular, destaca un cuadro de Rembrandt (¡asegurado en 20 millones de euros!) que representa a su anciana madre rezando. El cuadro es incluso más pequeño que la Mona Lisa, pero resulta fascinante.

Este inmenso palacio de 150 habitaciones interconectadas alberga también un lienzo de 125 metros de largo y 6 metros de alto. Como en Versalles, podrá perderse en las numerosas galerías, habitaciones, minicapilla privada y salón de banquetes. Todo el complejo está unido a la catedral, construida en 1628 en estilo barroco.

La terraza abovedada entre la catedral y la residencia constituye una buena transición y ofrece unas vistas magníficas del centro de la ciudad y las montañas.

Por último, una visita a la catedral completa el cuadro, con sus obras maestras que van del gótico al barroco. Es una de las únicas iglesias del mundo que alberga cinco órganos, ¡e incluso Mozart tocó en él!

Tras recorrer una galería, se llega al Museo de San Pedro, que expone los tesoros y obras de arte de la colección de la abadía benedictina.

Para disfrutar al máximo de la catedral, venga a mediodía. Entonces podrá asistir a un concierto de órgano de 30 minutos. El concierto es impresionante, ya que los sonidos de los siete órganos resuenan al mismo tiempo. Su colocación en la sala crea un conjunto musical único que transforma este momento en una verdadera experiencia auditiva. La entrada a la catedral está incluida en el precio del concierto.

Tenga en cuenta que el programa musical se muestra en una pantalla en alemán e inglés. La actividad es gratuita para los menores de 18 años.