Este parque tuvo varias vidas antes de convertirse en el jardín que conocemos hoy. Durante las excavaciones arqueológicas se encontraron reliquias que datan de la Edad de Piedra. Actualmente se exponen en el Museo Calvet.
También sirvió de fortificación en la época galo-romana y se transformó en castillo fortificado en la Edad Media. En el siglo XVIII, el sitio se convirtió en un lugar de esparcimiento y paseo para los habitantes de Aviñón. Un siglo más tarde, se llevaron a cabo importantes obras para darle un aspecto totalmente diferente, convirtiéndolo en un auténtico parque arbolado con bonitos céspedes. Se añadió un gran estanque a los espacios verdes y se instalaron varias estatuas de artistas célebres.