Parque Nacional de Bukhansan, incluido en el Libro Guinness de los Récords

El parque nacional existe oficialmente desde 1983 y figura incluso en la lista de los parques nacionales más populares y visitados del mundo.

El Parque Nacional de Bukhansan está repleto de picos de granito, arroyos y bosques salvajes. Los amantes de la naturaleza acuden en masa al parque para disfrutar del senderismo y la observación de aves locales. Además de su abundante naturaleza, el parque cuenta con numerosas atracciones culturales e históricas, desde templos a fortalezas.

Enclavado en el corazón del parque, el templo de Jingwansa, construido en el siglo XI, es famoso por ser un centro de educación. Contenía una impresionante biblioteca para la enseñanza de los eruditos confucianos. Lamentablemente, el templo original se quemó durante la Guerra de Corea, pero ha sido restaurado. El templo mantiene su dedicación a la educación superior transformándose en un centro de formación para monjas. Hoy en día, es posible inscribirse en uno de sus programas en el templo para comprender la vida monástica (reservar directamente en el lugar).

A los visitantes les encanta la colorida arquitectura, los extensos jardines y las estatuas del templo de Hwagyesa, considerado el más bello del Parque Nacional de Bukhansan. Se fundó en 1522 y está enclavado a los pies de la montaña Samgak.

La montaña de Bukhansan era una barrera natural contra las invasiones extranjeras. Sin embargo, para hacer la ciudad aún más segura, en el siglo II se construyó la fortaleza de Bukhansanseong. La impresionante fortaleza de piedra sigue en pie (la original fue destruida, pero la versión actual data de 1711), y es un majestuoso ejemplo de la arquitectura de la dinastía Joseon.

El senderismo es la principal actividad del Parque de Bukhansan. Y abundan los senderos por toda la región. Sin embargo, algunos senderos suelen cerrarse a su vez para proteger la biodiversidad.

• Ruta Daenammun: este sendero de 2,5 horas atraviesa una pintoresca campiña con pendientes suaves, ideal para principiantes y familias.

• Ruta Obong: esta ruta especialmente auténtica pasa por debajo de la montaña Dobongsan y lleva a los visitantes hasta la cascada Songchu. La caminata dura unas dos horas y tiene algunas pendientes, pero no se considera un sendero intenso o difícil.

• Pico Baegundae: El punto más alto del Parque Nacional de Bukhansan es el pico Baegundae, que se eleva a unos 830 metros. La mayoría de los entusiastas del deporte inician la caminata desde la entrada occidental del parque, y la subida a la cima implica un complicado paso entre pistas de tierra, escalones y rocas para trepar. La caminata es bastante difícil, sobre todo hacia el final. Con cuerdas, se puede remontar la montaña. El esfuerzo se ve recompensado por una impresionante vista de Seúl.

No está permitido acampar en el parque. Por tanto, para dormir en el parque hay que participar en uno de los programas de estancia en templos. Estos programas de estancia en templos coreanos ofrecen a los visitantes una visión de la vida budista a través de programas centrados en la meditación, la cultura y la tradición. Los participantes comen platos vegetarianos sencillos y duermen en habitaciones compartidas.

• Templo Geumsunsa : este templo de 600 años de antigüedad está muy cerca del centro de Seúl. La vida monástica del templo es muy tradicional, lo que añade una experiencia cultural única a su escapada a la naturaleza.
• TemploHwagyesa : Hwagyesa es famoso entre los budistas de todo el mundo por el monje Ven SoongSahn, que vivió en el templo hasta su muerte en 2004.
• Templo deJinkwansa : La gente suele elegir una estancia en el templo por la serenidad o la experiencia espiritual, pero Jinkwansa es famoso por su comida abundante y sana desde hace más de 1.000 años.