Peregrinación a La Meca

Una de las costumbres de la peregrinación es cruzar siete veces el espacio entre las dos pequeñas colinas Safa y Marwah, cerca de la Kaaba, dentro de la imponente mezquita Masyid al-Haram. El corredor que atraviesan los peregrinos tiene 450 metros de largo. El paseo en cuestión es una forma de recordar el viaje de Hajar a buscar agua para su hijo. A pocos kilómetros del centro de La Meca, la Montaña de la Luz (Yabal al-Nour), donde se dice que Mahoma tuvo su primera revelación con Dios, es también un lugar respetado y visitado.

Si va a La Meca, seguro que pasa por la Gran Mezquita. Venerada por millones de musulmanes de todo el mundo, las puertas de la Mezquita están siempre abiertas. El edificio central, la Kaaba, protege la Piedra Negra. Es muy difícil acercarse a esta famosa piedra, ya que todos los visitantes quieren besarla. Masjid Taneem es una segunda mezquita situada a pocos kilómetros, con zonas dedicadas a baños, abluciones y vestuarios para los peregrinos.

Se pueden degustar brochetas de pollo o cordero a la parrilla, con sopas y ensaladas. Una de las especialidades del país es la carne de camello. Otro plato típico es el kebsa, preparado con arroz y carne. También se encuentran influencias turcas, libanesas e iraníes en la cocina saudí, en los numerosos restaurantes de La Meca. El consumo de alcohol está prohibido, al igual que el de carne de cerdo. El té y el café son las dos bebidas más populares. Los amantes de los dátiles estarán encantados con el postre.

Si va a La Meca, podrá llevarse de vuelta agua zamzam, una alfombra de oración, khol, joyas de plata, incienso y diversos artículos de artesanía local. Encontrará todo esto en los zocos, por supuesto, pero también en el famoso Makkah Mall, el centro comercial mejor surtido de La Meca, con precios que van desde las gangas hasta los artículos más caros de las boutiques de lujo. La zona también cuenta con numerosos restaurantes, perfectos para tomar un tentempié rápido mientras se hacen las compras.

☀️ Mejor época: evite viajar a Arabia Saudí durante los meses de abril, mayo, junio, julio, agosto, septiembre y octubre. Las temperaturas pueden ser realmente abrasadoras en esta época del año, alcanzando a veces los 45°C. Prefiera los meses de noviembre y marzo, que caen entre el abrasador verano y el sorprendentemente crudo invierno.

🚌 Desplazamientos: para llegar a La Meca, puedes utilizar taxis o VTC como Uber o Careem, coger un autobús o el tren. Sin embargo, si eliges esta última opción, ten en cuenta que a la estación de La Meca solo pueden acceder los musulmanes. El servicio de autobús, Saudi Coach Bus, también conecta La Meca con muchas ciudades de Arabia Saudí.

Las gigantescas torres Abraj Al-Bait se elevan sobre la Gran Mezquita, con el reloj más impresionante del mundo en la más alta de ellas (seis veces mayor que el Big Ben). Podrá alojarse en los lujosos hoteles de cinco estrellas, que son cinco, o en los igualmente agradables pisos de alquiler, situados en este vertiginoso complejo, e ir de compras por varias plantas con cientos de boutiques, cada una más variada que la anterior.