Labastide d'Armagnac

Las bastidas, o pueblos fortificados construidos en la Edad Media, fueron construidas en el siglo XIII por los señores locales para afirmar la autoridad del rey de Francia. La Bastida de Armagnac se fundó en 1221 por iniciativa del conde de Armagnac. Fue un nuevo concepto de urbanismo, con edificios dispuestos alrededor de una gran plaza central, el corazón de la ciudad. Al rey Enrique IV le gustaba visitar La Bastide, donde se alojaba en una casa con vistas a la Place Royale, donde, según la tradición, vivía una de sus amantes: La maison Malartic. La leyenda cuenta que se inspiró en esta plaza para construir la plaza de los Vosgos de París.

Antaño corazón económico de la ciudad, la Place Royale, donde se alza la impresionante iglesia fortaleza, ha conservado sus arcadas y pasajes cubiertos donde es agradable refugiarse a la sombra cuando el calor estival está en su apogeo. Apartada de la plaza, encontrará una hermosa casa adornada con el letrero "Café du Peuple". Actualmente cerrado, fue un local festivo a principios del siglo XX, en el que se celebraban comedias y espectáculos de cancán francés. Cuando cerró, en 1954, era el café más antiguo de Francia.

Para disfrutar al máximo de Labastide d'Armagnac y de la región, visite la Oficina de Turismo de las Landas de Armagnac, situada en el centro del pueblo, donde podrá sumergirse en el ambiente medieval y pasear por las callejuelas entre las casas de piedra (no hay riesgo de perderse) para apreciar el ingenio de la construcción arquitectónica del pueblo.

La iglesia fortaleza

El imponente tamaño de este edificio del siglo XV se debe a que el campanario era originalmente la torre del homenaje de la Bastida. La iglesia de Notre Dame de l'Assomption, que ha sufrido numerosas renovaciones a lo largo de los siglos, merece una visita, sobre todo para admirar el magnífico mural en trampantojo que cubre el muro de la cabecera, pintado por el artista italiano Ceroni en 1831. La iglesia abre todos los días de 10.00 a 19.00 horas. Visitas guiadas concertadas todo el año.

El Templo de las Bastidas

Antiguo templo protestante en el corazón de Labastide d'Armagnac, el Temple des Bastides se construyó en 1607 tras las Guerras de Religión. En la actualidad, el edificio alberga exposiciones de arte contemporáneo de gran calidad, cuya modernidad combina a la perfección con el aura histórica del lugar. Para más información, llame al 05 58 44 81 42.

Capilla de los Ciclistas

Atención, aficionados al ciclismo que no se perderían una etapa del Tour de Francia por nada del mundo. Al salir de Labastide d'Armagnac en dirección al Gers, un sorprendente pórtico adornado con bicicletas destaca sobre el bucólico telón de fondo de la campiña. Más allá del pórtico hay una hermosa capilla románica, construida sobre los restos de una antigua villa galo-romana. ¿Nada fuera de lo común? Espere a ver el interior. Desde 1959, la capilla alberga una impresionante colección de maillots que pertenecieron a algunos de los grandes nombres del ciclismo. Poulidor, Mercks, Ocaña, Virenque y Jeannie Longo, sus reliquias se codean con gorras y otros equipamientos dejados allí por ciclistas aficionados. Es un santuario verdaderamente insólito.

Ecomuseo de Armagnac

Los viñedos que rodean Labastide d'Armagnac son la cuna del Armagnac, considerado el aguardiente más antiguo de Francia. Las primeras pruebas de su uso se remontan a 1310, así que ¿por qué no aprovecha su estancia en Bas-Armagnac para descubrir los secretos de la producción de este delicioso aguardiente? En medio de una finca de 80 hectáreas, el Château Garreau alberga el maravilloso "Ecomuseo de l'Armagnac", donde podrá aprender más sobre las técnicas de destilación y admirar las antiguas herramientas expuestas. También hay una tienda donde podrá comprar una botella de este preciado néctar, así como sabrosos productos locales. Durante los meses de verano, el ecomuseo también ofrece numerosos eventos (conciertos, degustaciones, espectáculos de cetrería, etc.) para toda la familia.

Los precios varían de 6 a 12 euros por persona, según la visita. En verano, el museo abre de martes a viernes de 10.00 a 19.00 h, sábados y lunes de 14.00 a 19.00 h y domingos de 15.00 a 19.00 h.

Una de las mejores maneras de disfrutar del encanto de Labastide d'Armagnac es darse un capricho en un buen restaurante. En Le Bastignac, situado en los soportales de la Place Royale, podrá degustar una cocina local generosa y sabrosa. El pato está muy presente en el menú, ¡así que tome nota! Abierto de lunes a sábado de 8:00 a 18:00. Y si prefiere una buena pizza, diríjase a Pizz Giulietta, en el corazón de la Bastida. Abre los jueves de 17:00 a 23:00, los viernes y sábados de 17:00 a 2:00 y los domingos de 17:00 a 23:00.