Los espacios abiertos te dan alas. Ganas de aventura y fuertes sensaciones. La Sierra Nevada en torno al lago Tahoe no es una excepción a esta regla, y atrae a los amantes de las vacaciones deportivas: esquí, snowboard freestyle, escalada, alpinismo, jet-ski, e incluso buceo en lago en un lago donde se podría estar de pie o tumbado ¡1,5 veces la Torre Eiffel entera!
El lago Tahoe lo tiene todo. Estadounidenses, franceses, alemanes, italianos... todos buscan lugares donde disfrutar de estas actividades, a veces extremas, en un entorno salvaje pero acogedor, con sus propias infraestructuras cerca.
Sabemos que la zona es famosa por el putting green y el bandido manco, y que Squaw Valley acogió los Juegos Olímpicos de Invierno en 1960. También sabemos que se puede sobrevolar Sierra Nevada en avioneta o helicóptero. Menos conocidos, sin embargo, son los paracaídas y trajes de alas que te convierten en un hombre volador, y las tirolinas desde lo alto de los árboles que te impulsan a 80 km/h.