Cuando la noche empieza a dar paso al día, los veraneantes aún duermen y los preparadores han terminado su trabajo, es hora de ponerse en marcha para vivir la experiencia First Tracks. Los remontes se ponen en marcha para llevar al grupo de aventureros a un espectáculo en plena montaña. Acompañados por patrulleros de esquí de la estación, el pequeño grupo es invitado a descubrir un panorama excepcional. Entre la nieve fresca y la luz del día que empieza a revelar el relieve alpino circundante, la vista es mágica.
En determinadas semanas, los veraneantes en busca de paisajes únicos pueden disfrutar de un amanecer inolvidable. El blanco inmaculado de la nieve armoniza con los colores cambiantes del sol naciente, ¡una experiencia realmente sobrecogedora! Los más madrugadores podrán realizar las primeras pistas del día en la nieve, aprovechando un excelente descenso.