Lago Korission, Corfú en plena naturaleza

No hay otro lugar como el lago Korission en todo Corfú. Así como uno se acostumbra a la escarpada costa, las playas dentadas y el paisaje ondulado del norte y el centro de la isla, el paisaje cambia radicalmente al llegar al lago, que marca la entrada al sur de Corfú.

En los alrededores del lago Korission, el altímetro se acerca a cero. Las aguas, raramente turbulentas, cubren varios miles de hectáreas. Formando una auténtica laguna, están protegidas del mar por una larga franja de arena, la mayor playa de todo Corfú: Chalikounas. Los amantes del espacio lo apreciarán, al igual que los de la naturaleza virgen: toda la zona del lago Korission es un lugar Natura 2000.

En algunos lugares, los depósitos arenosos dan lugar a verdaderos relieves: ¡las dunas del lado de la playa de Issos pueden superar los 15 metros de altura! Otra particularidad de las orillas del lago son los bosques de enebros fenicios, que a menudo se confunden con cedros en estas zonas, y que añaden un toque de frágil verdor: estos arbustos son conocidos por su lento crecimiento, ¡así que conviene no arrancarles las ramas!

Paraíso de las aves, el lago Korission alberga más de cien especies, entre ellas cormoranes grandes, garcetas, patos salvajes e incluso flamencos rosas. El número de visitantes varía según la estación, ya que el lago es una escala para muchas aves migratorias.

El lago Korission es un soplo de aire fresco para quienes prefieren las zonas menos concurridas y prácticamente sin urbanizar a los ruidosos complejos turísticos y las playas abarrotadas. A lo largo de Chalikounas, siempre se puede encontrar un lugar apartado más allá del último chiringuito. Incluso los naturistas encontrarán aquí lugares adecuados, sin ser molestados.

Las aguas de la playa de Chalikounas son magníficas, aunque a veces ventosas. Es un lugar muy conocido en Corfú para practicar diversos deportes acuáticos, entre ellos el kitesurf. Hay clubes locales que ofrecen clases y alquiler de material, así como windsurf, paddleboard y barca a pedales, para los que quieran hacer algo más que relajarse al sol. En la orilla del lago Korission se puede nadar, pero es menos agradable debido a la falta de profundidad en la orilla. Un paseo por las orillas es más bien una oportunidad para observar las aves que habitan la zona, ¡cámara en mano!

En una línea similar a la de Chalikounas, la playa de Issos, con sus altas dunas, sigue siendo virgen en la zona que rodea el lago Korission: un lugar perfecto para alejarse de todo, e incluso para sentirse solo en el mundo fuera de temporada. Luego, en dirección a Agios Georgios, reaparece la civilización con sus tumbonas y sombrillas, sus actividades playeras y sus hoteles a orillas del mar.