Jazz Fest: la cumbre del jazz en Nueva Orleans

El festival se celebró por primera vez en 1970 y desde entonces no ha dejado de crecer. Fue fundado por Georges Wein con la idea de promover la cultura de su ciudad. Nueva Orleans tiene su propia música, su propia cocina y unas raíces únicas en el país...

En la actualidad, rinde homenaje a la música jazz, pero sigue privilegiando todas las riquezas de la ciudad. La gastronomía de la región se exhibe en varios stands.

En el plano cultural, algunos de los grandes nombres de la música se suben al escenario. Artistas de otros estilos musicales también acuden regularmente a hacer vibrar a los asistentes al festival. Leyendas del rock y del rap figuran a menudo en el programa (los Red Hot Chili Peppers en 2022).

El New Orleans Jazz & Heritage Festival atrae a casi 500.000 visitantes, lo que lo convierte en uno de los mayores del mundo.

Para hacer frente a las multitudes, los escenarios principales se agrupan en el hipódromo de Fair Grounds. El recinto se encuentra entre Bayou St Jean y New Orleans City Park.

Antes del festival, se instalan varias carpas (14 en total) en el recinto del hipódromo. Cada carpa tiene su propio estilo musical, ¡y hay para todos los gustos! Por ejemplo, la carpa Gospel, la carpa Jazz, la carpa Blues...

Incluso hay una carpa infantil para las familias, así que el festival está abierto a todos los amantes del jazz.

Además de la música, es el ambiente festivo y el espíritu de unión lo que dejará una impresión duradera en los asistentes al festival.

Por no hablar de los puestos de comida, donde podrá saborear la gastronomía local al son del jazz, ¡una auténtica delicia! También podrá comprar artesanía, sobre todo en las carpas Gospel y Blues.

Por último, para los que no quieran gastarse el dinero, hay aún más músicos callejeros. De hecho, todo el centro de Nola vive al son de la música.

Los instrumentos de metal (trompetas, saxofones, trombones) hacen resonar la fiesta por todos los barrios de Nola...

Como decíamos antes, uno de los placeres de este festival es la comida.

Tendrá una enorme oferta en el mismo recinto.

Hay varios puestos para elegir, y todas las especialidades regionales están allí. A veces vienen chefs locales y presentan sus platos estrella.

Podrá elegir entre jambalaya (especialidad de Luisiana a base de arroz), alubias rojas en salsa, cangrejos de río cocinados de diferentes maneras e incluso caimán...

Además, podrá asistir a clases de cocina en el Escenario de Demostraciones Gastronómicas.

Los restaurantes de la ciudad se llenan en esta época del año. Si puede, reserve con antelación siempre que sea posible.

Los hoteles se reservan con mucha antelación. Además, a menudo exigen una estancia mínima de 4 o 5 noches.

El Jung Hotel and Residences es una buena opción. Este hotel de más de 200 habitaciones está muy cerca del festival (requiere traslado). Destacan su piscina en la azotea y sus vistas de la ciudad.