Cultura, naturaleza y mar, de Santo Domingo a Saona

Sólo media hora en coche separa el aeropuerto de la zona colonial de Santo Domingo, 27 km más al oeste. Declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, la cuna del Nuevo Mundo puede descubrirse a pie. Es la ocasión de admirar tesoros de más de cinco siglos. En el programa: la primera catedral del Nuevo Mundo, el primer monasterio, la primera calle de América, la primera fortaleza y, por supuesto, el emblemático Alcázar de Colón.

Sede de la corona española en el Nuevo Mundo, este edificio desempeñó un papel fundamental en la conquista y colonización españolas de América. Desde aquí, Cortés, Pizarro, Balboa y Velázquez planearon sus conquistas de México, Perú, Panamá y Cuba, respectivamente.

No hay mejor manera de empezar su visita que alojándose en un palacio del siglo XVI. El Hotel Hodelpa Nicolás de Ovando es toda una institución en la capital dominicana. Se trata, sencillamente, de la antigua residencia del primer Gobernador de las Américas, lo que le sumerge de inmediato en el ambiente de la zona colonial de Santo Domingo. Este monumento histórico también cuenta con una hermosa piscina y un restaurante en su encantador patio de época.

Nos levantamos temprano porque esta mañana nos espera un largo viaje en coche: dos horas y media hasta Jarabacoa, la capital ecoturística del país, situada a 529 metros sobre el nivel del mar en las montañas de la Cordillera Central. Desde aquí parten las expediciones para escalar el Pico Duarte, la cima más alta del Caribe con 3.180 metros, pero eso será en otra ocasión, ya que se trata de una caminata mínima de dos días. Tendremos que conformarnos con admirar la espectacular cascada del Salto Jimenoa Dos, a 20 minutos de Jarabacoa. Una excursión de dos horas permite rodear esta poderosa catarata y sus pozas a través de tres pasarelas suspendidas sobre el río Jimenoa.

Salto Jimenoa Dos

La cascada Salto Jimenoa Uno se encuentra a 20 minutos en coche de la ciudad de Jarabacoa.

Salto de Baiguate

20 minutos más adelante en coche, llegamos a otra cascada: el Salto de Baiguate, enclavado en un profundo cañón. Una tarde de barranquismo que termina con un descenso en rappel por el Salto de Baiguate, una cascada de 25 metros de altura que se sumerge en una piscina de color verde esmeralda, ¡un paraíso para nadar!

A orillas del río Jimenoa, el Gran Jimenoa, situado a los pies de la Cordillera Central, es un alojamiento ecológico en plena naturaleza. Disfrute de los platos típicos de la montaña (mofongo de cochinillo, conejo asado, estofado de cabra o macho cabrío...), báñese en la piscina o en el río Jimenoa y relájese en el spa.

Concepción de La Vega

A 45 minutos en coche hacia el noreste se encuentra Concepción de La Vega. Si viene en febrero, tendrá la oportunidad de asistir al carnaval más impresionante del país, ¡y uno de los más famosos del planeta! También podrá visitar su asombrosa y moderna catedral, que alberga la singular imagen de un Cristo resucitado en lugar de en su cruz. También tendrá tiempo para ir de compras y llevarse algún recuerdo, como una de las máscaras de carnaval. A 10 minutos en coche en dirección a Santo Cerro, haga una parada en Vega Vieja para ver las ruinas arqueológicas de la ciudad original fundada por Cristóbal Colón en 1494, hoy convertida en parque nacional.

Santo Cerro

A 10 km al norte de La Vega, Santo Cerro es uno de los lugares más sagrados del país. Aquí se puede admirar una gran cruz de 14 metros que domina el valle del Cibao, dedicada a Nuestra Señora de las Mercedes, patrona de la República Dominicana. Cada 24 de septiembre, dominicanos de todo el país peregrinan para rendir homenaje a la patrona nacional.

Santiago de los Caballeros

Otra buena media hora en coche y podrá disfrutar de un merecido almuerzo en Santiago de los Caballeros, la capital del puro. Acomódese en una de las "lechoneras", un restaurante tradicional de cerdo asado. Después de un buen café, nos dirigiremos a La Aurora, el principal productor y exportador de puros premium del país, fundado en 1903. Aquí podrá observar la técnica de liado a mano y aprender a liar, sujetar y fumar su propio puro. A continuación, podrá recorrer la ciudad en coche de caballos desde el Parque Duarte. El día termina con una animada vida nocturna en los bares que rodean el Monumento a los Héroes de la Restauración, en pleno centro de la ciudad.

Hotel Hodelpa Centro Plaza

En pleno centro de Santiago de los Caballeros, el hotel Hodelpa Centro Plaza está perfectamente situado para explorar los lugares emblemáticos de la segunda ciudad más grande del país. Incluso cuenta con un casino.

Cola de Pato

En dirección noreste: 1 hora y 15 minutos de trayecto y estamos en Cola de Pato, en medio de las montañas de la pequeña provincia de Espaillat, un lugar poco conocido y, por tanto, poco frecuentado. Se trata de una segunda experiencia de barranquismo de dos horas en medio de una vegetación exuberante, con seis cascadas y doce saltos de hasta 10 metros de altura.

Salto de Socoa

Es hora de volver hacia el sureste del país, ¡las carreteras del interior son largas! Tras algo más de 3 horas, llegamos por fin al Salto de Socoa, una hermosa cascada de 20 metros de altura en la carretera de Santo Domingo a Samaná. Es una parada refrescante, con un chapuzón en su piscina natural en medio de un frondoso bosque tropical.

A 30 minutos en coche de Salto de Socoa, podrá pasar la noche en una finca mágica.

La República Dominicana es el mayor exportador mundial de cacao ecológico. La excursión "Chocolate Discovery" le llevará a la provincia de Hato Mayor. Es una oportunidad para visitar una cooperativa de cacao y seguir las distintas etapas del proceso de elaboración del chocolate, recorrer plantaciones de cacao, antes de compartir una comida dominicana con los lugareños.

La visita se completa con una degustación de chocolate caliente, mermelada de cacao y vino de chocolate. La jornada termina en Higuey, capital de la provincia de La Altagracia, a 45 km al oeste de Punta Cana, famosa por su asombrosa basílica.

Basílica-Catedral de Nuestra Señora de la Altagracia

Inaugurada en 1971, esta catedral es uno de los lugares religiosos más importantes de la República Dominicana. Honra a la Virgen de la Altagracia, patrona de los dominicanos, y destaca por su bóveda de 69 metros de altura. El altar alberga un cuadro de la Virgen María del siglo XVI, pieza central de la devoción. Cada 21 de enero, peregrinos de todo el país acuden a rendirle homenaje.

El Hotel Naranjo es un encantador hotel boutique con hermosas vistas a la Catedral Basílica de Higüey. Mención especial merece el delicioso y abundante desayuno.

Tras 45 minutos en coche, llegaremos al encantador pueblo pesquero de Bayahibe, desde donde tomaremos el barco a Saona, la isla más grande de la República Dominicana, una excursión imprescindible desde los resorts de Punta Cana. ¡Disfrutaremos de un merecido día de descanso tras este intenso recorrido que combina visitas culturales y ecoturismo con cascadas y barranquismo!

En el programa: tumbarse en la playa, nadar en aguas paradisíacas, bucear... Picnics y bailes al son del merengue y la bachata puntúan la jornada en esta isla caribeña, que sólo alberga un pueblo.

A la ida o a la vuelta, el barco se detiene en la "piscina", un charco en un banco de arena donde se sirve ron y donde se puede bucear en busca de estrellas de mar gigantes (cuidado con tocarlas, gracias por ellas).

De vuelta a Bayahibe, la última noche de su viaje tendrá lugar en el Dominicus La Romana. No se deje engañar por su nombre: el hotel no está en La Romana, sino en Bayahibe. Se trata de un club de alta gama con todo incluido y gran animación las 24 horas del día, frente a la magnífica playa de Dominicus.

Un hotel para toda la familia, con spa, numerosas instalaciones deportivas, animación de alto nivel, habitaciones amplias y confortables con conexión Wi-Fi gratuita, sin olvidar la variedad y calidad de sus restaurantes.

Tómese su tiempo para disfrutar de un masaje en la playa como colofón a su estancia.

Al día siguiente, el aeropuerto de Santo Domingo está a hora y media y el de Punta Cana, a una hora en coche.