Mascate, un destino entre mar y montaña en Omán

El puerto, el zoco y el mercado de pescado se encuentran en el barrio de Muttrah. Es fácil pasear por esta zona, ya que las distancias no son muy grandes. No dude en acercarse a Muttrah a primera hora de la mañana para ver cómo los pescadores sacan el pescado de las redes. Después podrá pasear por la cornisa. En alta mar, el contraste entre los tradicionales dhows de pescadores y los dos megayates propiedad del sultán Qaboos es impresionante.

Situado en una callejuela cubierta pero ventilada, el zoco reúne una miríada de pequeñas tiendas que venden incienso, aguas florales, polvos de madera perfumados, joyas de plata, juegos de café tradicionales, khanjars (dagas de hoja curva) y tejidos variados. Tenga en cuenta que cierra de 12.00 a 16.00 h.

Si se continúa bordeando el mar, se llega a la vieja Mascate, cuyo puerto está custodiado por dos fuertes construidos por los portugueses en el siglo XVI (fuerte Al Jalali y fuerte Al Mirani). En la parte trasera se encuentra el palacio del sultán Qaboos. El casco antiguo de Mascate alberga varios museos interesantes.

En una callejuela llena de flores, el bonito museo Bait Al Zubair (bait significa casa en árabe), dedicado a la artesanía y las tradiciones populares, alberga colecciones de objetos tradicionales y la reconstrucción de una aldea típica. Su jardín alberga un falaj, un ingenioso sistema de riego ancestral declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. En el anexo Bait Al Oud se exponen mapas antiguos, grabados y conmovedoras fotos en blanco y negro.

Inaugurado por François Mitterrand en 1992, el Museo Franco-Manomaní (Museo Bait Faransa), situado en la antigua residencia de los cónsules franceses, recorre la historia de las relaciones entre ambos países desde el siglo XVIII, cuando Luis XIV se interesó por el destino. Esta residencia destaca también por su arquitectura.

Situado frente al Palacio Real de Al Alam, el Museo Nacional de Omán recorre la historia y las tradiciones del país, con más de 7.000 piezas expuestas. Este inmenso museo alberga doce galerías temáticas, desde la prehistoria hasta el apogeo de su Imperio, que se extendió hasta Baluchistán y Zanzíbar, pasando por su Renacimiento desde la llegada al poder del sultán Qaboos. Cerámica, joyas, cofres con tachones, muebles preciosos, accesorios marítimos: la escenografía moderna y didáctica de este luminoso escaparate es todo un éxito.

La imponente y lujosa Gran Mezquita del Sultán Qaboos, rodeada de cinco minaretes en referencia a los cinco pilares del Islam, es sencillamente grandiosa. Presenta elementos de la arquitectura omaní, india, iraní, mongola, turca y marroquí. Este monumental lugar de oración puede albergar hasta 20.000 fieles.

En la sala de oración masculina, la araña de cristal austriaco Swarovski, suspendida de la cúpula central de 50 metros de altura, pesa 8 toneladas y mide 14 metros de largo. Es la segunda araña más grande del mundo (después de la de Abu Dhabi), engastada en oro de 24 quilates.

La majestuosa cúpula y la elaborada decoración no dejan indiferente a nadie. El suelo de mármol italiano está cubierto por una alfombra fabricada en Irán, una pieza única de 35 toneladas de peso y creada por 600 mujeres: se utilizaron 28 colores en una superficie de 4.263 m² (60 x 70 metros), ¡la segunda alfombra de suelo más grande del mundo (de nuevo, después de la de Abu Dhabi)! Por la noche, la iluminación le da todo su esplendor. Es una de las pocas mezquitas del mundo abiertas a los no musulmanes, así que ¡aprovéchela!

La mezquita abre todos los días de 8:00 a 11:00, excepto los viernes. La entrada es gratuita. Las piernas y los brazos deben ir cubiertos, así como el pelo en el caso de las mujeres. Los no musulmanes pueden entrar en las salas de oración, por supuesto descalzos.

La Ópera Real de Mascate es un lugar de gran interés cultural, único en la Península Arábiga, que ofrece un programa de espectáculos de renombre internacional. La temporada va de principios de septiembre a finales de mayo. Llama la atención la limpieza del recinto, bañado por un agradable olor a incienso. El suelo de mármol italiano, el altísimo techo adornado con artesones de madera de teca birmana y la araña de cristal de Swarovski constituyen un marco deslumbrante.

Antes de entrar en el auditorio, con capacidad para 1.100 personas, se pasa por unas cámaras acústicas. Cada butaca está equipada con una pantalla individual que traduce la ópera al inglés, al árabe y a la lengua de la obra que se representa (francés, italiano o alemán). Una planta está reservada a las personalidades. En la ópera se exponen numerosos instrumentos musicales donados por Francia, Alemania e Italia, como violines y trompetas. También se puede admirar el órgano más grande del mundo, originario de Alemania.