Descubrir Jebel Akhdar

Si no ha previsto alquilar un 4x4 para su estancia en Omán, el viaje a Jebel Akhdar puede complicarse rápidamente. En la carretera que lleva a Jebel Akhdar, y por tanto a la meseta de Saiq, hay un puesto de control a unos kilómetros al norte de Birkat al Mouz.

Después de este punto de control, no se le permitirá continuar sin un vehículo 4×4. Si quiere llegar a Jebel Akhar por su cuenta, tendrá que alquilar un 4×4 y asegurarse de que los frenos están en buenas condiciones, ya que la carretera es empinada. La subida a la meseta, una vez pasado el puesto de control, dura unos 45 minutos por una carretera empinada pero en buen estado hasta el pueblo principal.

Si no se desea alquilar un 4x4 y aun así llegar a Jebel Akhdar, hay otras opciones. Puede dejar el coche en el aparcamiento inferior y tomar un taxi 4x4 hasta su hotel o para explorar la zona. O puede optar por una excursión de un día desde Mascate.

La mejor época para explorar Jebel Akhdar y sus alrededores es la primavera, cuando las plantaciones son exuberantes y las rosas florecen. El invierno es la época más concurrida por los turistas (¡aunque aún estamos lejos del turismo de masas!), y el verano, por los lugareños que buscan un clima más suave.

Antes de emprender el ascenso, le recomendamos que se detenga en el centro de recepción del punto de control para recoger un mapa de las montañas. En él se indican todos los lugares que hay que visitar, junto con las coordenadas GPS de los puntos principales. Pero no se preocupe, no hay muchas carreteras y no se perderá.

Además de admirar el increíble panorama que se abre ante usted, hay muchas cosas que hacer en la zona. Le recomendamos algunas de ellas:

• Admire las impresionantes vistas desde el mirador de Diana (llamado así por Lady Diana, que lo hizo famoso);
• Visitar el antiguo pueblo del interior de Wadi Bani Habib;

Hacer la ruta de las ros as de Al Ayn hasta la aldea de las rosas de Al Aqur (sobre todo en primavera).

También puede realizar diversos paseos por el interior de los uadis o a lo largo de los falaj (sistemas de riego), visitar el pueblo de Ar Rus con sus casas de adobe en la ladera de la montaña, o explorar las cuevas naturales como Al Sahil, Al Biban o Al Mawel. Para mayor seguridad, se recomienda caminar con un guía.

El hotel Alila Jabal Akhdar es por sí solo una buena razón para visitar estas montañas. Más que un hotel, es una experiencia por derecho propio. Situado al borde del "Gran Cañón" de Omán, este enclave privilegiado ofrece una colección de viviendas tradicionales de piedra oscura, con interiores limpios y cuidados. La sublime piscina infinita domina los escarpados acantilados, el cañón y el resplandeciente sol. Todo un espectáculo.

Además de un entorno excepcional, el hotel ofrece un sinfín de emocionantes actividades que puede reservar con antelación desde Francia. Si dispone de tiempo, le recomendamos que pase al menos dos noches en este lugar atemporal para sacarle el máximo partido.

Una de las actividades que se ofrecen es la vía ferrata. El hotel tiene sus propias vías ferratas en el cañón, que van desde puentes colgantes hasta ascensiones bastante fáciles. Si le gustan las emociones fuertes y no es muy sensible a las alturas, esta es la mejor forma de disfrutar de las increíbles vistas.