El sueño azul en Chefchaouen

Chefchaouen está situada en el norte de Marruecos. La ciudad, apodada "la ciudad azul", toma su nombre de "chouf" y "echaouen", que significan "mirar" y "cuernos", términos que hacen referencia a los picos de las montañas que rodean la ciudad. La traducción más plausible es "observar las cimas de las montañas". Su rasgo distintivo es el color azul. Un color que cubría las paredes de la ciudad en la década de 1930, pintadas por refugiados judíos que se instalaron aquí.

Aunque el objetivo principal eraatraer turistas y así impulsar la economía de la ciudad repintándola entera, el color azul no se eligió por casualidad. De hecho, este color evoca el cielo y el firmamento. Sea como fuere, la apuesta salió bien, ya que miles de turistas visitan Chefchaouen cada año y se sumergen en este océano marroquí.

No es cualquier tono de azul el que cubre las calles de Chefchaouen. Existe un código de colores que hay que respetar, según las casas y su arquitectura. Cuanto más altas son las casas, más claro es el tono de azul. Esta gradación da lugar al maravilloso mosaico que es Chef chaouen. Hoy en día, la ciudad está inscrita en la lista del patrimonio cultural inmaterial de la UNESCO.

Perderse por las calles azules de la medina

Aunque no toda la ciudad está pintada de azul, la medina se asemeja a un océano, con sus muros de un azul intenso. La medina de Chefchaouen es magnífica, y muchos la consideran una delas más bellas de Marruecos. Piérdase por sus callejuelas azules para descubrir todos sus secretos. Cada rincón cuenta una historia y cada casa es testigo de las tradiciones de la ciudad.

La medina sigue siendo la zona más visitada y fotografiada por los turistas, sin duda porque es el barrio mejor guardado de Chefchaouen y el lugar donde el azul es más intenso.

Conozca a sus habitantes más simpáticos

La ciudad azul de Chefchaouen es un verdadero santuario para los gatos. Estas pequeñas criaturas siempre han sido muy populares en el mundo musulmán, e incluso el profeta Mahoma estaba muy unido a su gato Muezza. Aún hoy, los habitantes de Chefchaouen siguen perpetuando este apego.

En general, los países mediterráneos suelen estar invadidos por estas ronroneantes bolitas de pelo. Grecia y Túnez son excelentes ejemplos. Amantes de los gatos, ya sabéis dónde planear vuestras próximas vacaciones. "¡Miau!

De compras por los zocos

Laartesanía desempeña un papel importante en la economía de la ciudad, y del país en general. Muchas tiendas exponen sus creaciones en las paredes azules. No faltan ideas para comprar recuerdos de Chefchaouen. Alfombras, iluminación, decoración, especias... ¡hay para todos los gustos! Un recuerdo de Chefchaouen en su casa es un trocito de viaje hogareño.

Visitar la kasbah

En el corazón de la medina azul, la casba de Chefchaouen y sus verdes jardines evocan laAndalucía más cercana. Es una delicia perderse en este océano de verdor y deambular de sala en sala mientrasse relata la intensa historia de la ciudad. Y para reponerse de las emociones, nada como hacer una pequeña pausa para disfrutar de un té a la menta en una de las terrazas de las numerosas placitas que rodean la ciudad, mientras se contemplan las montañas circundantes.

Vestido todo de azul y blanco, el pueblo de Chefchaouen es un lugar único en el mundo: ¡no lo pase por alto en su próximo viaje a Marruecos! Prevea al menos medio día para poder recorrerlo y disfrutar de su singular atmósfera.

🚌 ¿Cómo llegar a Chefchaouen?

El aeropuerto internacional más cercano es el de Tánger, a unos 110 kilómetros. El aeropuerto de Fez, por su parte, está a casi 200 kilómetros. Desde allí, tendrá que coger un coche o reservar una excursión de un día para visitar Chef chaouen.

👉 ¿Cuándo ir a Chefchaouen?

Para vivir plenamente este "sueño azul", lo mejor es visitar Chefchaouen entre mayo y junio, antes del calor estival, y entre septiembre y octubre, cuando todavía hay mucha luz para admirar los llamativos colores de la ciudad. Además, los billetes de avión a Marruecos son más baratos en esta época del año que durante los meses de verano. Es una buena manera de visitar la perla azul del Magreb.