Si quiere descubrir la sabana, Kenia es el lugar indicado. El país es famoso por su fauna salvaje. Cuenta con decenas de parques nacionales donde se pueden ver leones, jirafas, ñus y cebras. Para reponerse de las emociones, hay que pasar unos días descansando en las playas del océano Índico.
Del cálido aliento de un rinoceronte a las carreras de leopardos, de la melosa mirada del Rey León al frescor de un elefante, Kenia es famosa por sus reservas de animales. La flora y la fauna se suman a los variados paisajes de este país miembro de la Commonwealth. El valle del Rift alberga numerosos lagos, como el Turkana, donde se congregan flamencos rosas y pelícanos. Pero más allá de su panorama de postal, Kenia es también una tierra de encuentros donde conviven diferentes etnias. Conocemos a los masai, un pueblo que ha sabido conservar sus tradiciones. Desde su capital, Nairobi, hasta Mombasa, Kisumu, Watamu y Lamu, Kenia ofrece un amplio abanico de posibilidades turísticas. Los excursionistas pueden llegar hasta el monte Kenia para ascender 5199 metros, mientras que los menos deportistas pueden relajarse en la playa a los pies de una laguna azul turquesa.
Días 1 a 2 Nairobi y el Parque Nacional de Nairobi
Nairobi es la capital de Kenia desde 1905. Situada a 1.660 m de altitud, goza de un clima agradable todo el año. No hay nada especialmente destacable en su arquitectura, pero su reciente construcción la ha dotado de mucho espacio, parques y jardines, lo que la convierte en una ciudad aireada. El ambiente es agradable.
Se puede visitar el Centro de Conferencias Kenyatta, el Palacio de Justicia, el Parlamento, el Mausoleo Kenyatta, la Gran Mezquita Jamia y una serie de edificios coloniales que se pueden divisar en algunos lugares (Casa Panafricana, Biblioteca Mc Millan, etc.). Como capital gastronómica y comercial, Nairobi ofrece suficientes actividades culturales y nocturnas para pasar un día estupendo. Pero Nairobi es sobre todo un punto de partida para excursiones a la sabana. La reserva de caza más cercana a la ciudad es el Parque Nacional de Nairobi.
Casa y cabañas Ol Losowan, Karen
¡Precioso alojamiento con piscina al aire libre!Tras visitar la ciudad, emprenda su primer safari con el telón de fondo del edificio, un panorama relativamente sorprendente y, sobre todo, único en el mundo. No se pierda el Giraffe Centre y el David Sheldrick Wildlife Trust, un vivero de elefantes huérfanos. Ambos están cerca del Parque Nacional de Nairobi.
Días 3 a 5 Parque Nacional de Masaï Mara
El parque nacional más conocido es la Reserva Nacional de Massai Mara. Situado en el sureste de Kenia, comparte territorio con el Parque del Serengeti, que pertenece a Tanzania. Los animales viajan de un país a otro durante la Gran Migración. Cruzar el río Mara es un espectáculo extraordinario.
La lista de especies que se pueden encontrar es larga. Los encuentros con leones no son infrecuentes, como tampoco lo son los avistamientos de hipopótamos, cebras, ñus y hienas... Por otro lado, hay que tener un poco más de suerte para provocar al guepardo, escondido en los huecos de las ramas de los árboles. Hay dos formas de llegar.
Un magnífico lodge en el Masaï Mara
Campamento PrideInn Mara
¡Precioso establecimiento con piscina!Se puede llegar a la reserva en avión en poco más de una hora. Por tierra, hay que tener más paciencia. Sólo hay que recorrer 250 km, pero no es una autopista en toda regla. La aventura comienza en cuanto se entra en las pistas keniatas. El viaje dura al menos seis horas. Antes de llegar, recuerde que tendrá que pagar una tasa de entrada y residencia si se aloja dentro de la reserva.
Días 6 a 8 Lago Naivasha
En el Gran Valle del Rift, no lejos del majestuoso monte Kenia, se encuentra el lago Naivasha, uno de los pocos lagos de agua dulce del valle. Es una maravilla natural, un auténtico paraíso para las aves cuya superficie fluctúa enormemente con las estaciones. Oasis de tranquilidad, es el descanso perfecto entre los distintos parques que se visitan.
Un hotel a orillas del lago Naivasha
Club de campo Muthu Lake Naivasha, Naivasha
¡Precioso establecimiento con piscina y spa!En su corazón se encuentra Crescent Island, una isla o península según la estación, y un lugar de safari único en el mundo. Aquí podrá pasear tranquilamente a pie y observar jirafas, ñus, cebras y gacelas con toda tranquilidad, ya que no hay grandes depredadores. Un auténtico Jardín del Edén. Incluso puede hacer un safari a caballo.
Días 9 a 11 Parque Nacional de Amboseli
Pequeño en tamaño, pero parque emblemático del país, no le dejará indiferente. Con sus extensiones arenosas, sus pantanos, sus matorrales espinosos y sus llanuras salpicadas de acacias, el rostro de Amboseli cambia con las estaciones. Su situación geográfica no puede dejar indiferente, ya que se encuentra a los pies de la montaña más alta y mítica de África, el Kilimanjaro, que domina la vecina Tanzania. Un safari realmente inolvidable a los pies de esta suntuosa montaña nevada.
Días 12 a 13 Mombasa
Para rematar su viaje a Kenia por todo lo alto, explore sus 400 kilómetros de playas. Aunque el país es más conocido por sus magníficas llanuras áridas y su espectacular fauna salvaje, no se pierda tampoco sus inmaculadas playas de arena fina. Mombasa es la puerta oceánica de Kenia. Es la segunda ciudad del país después de Nairobi y uno de los centros económicos y turísticos más importantes. Explore el casco antiguo y el viejo fuerte, testigo de la historia swahili que ha atravesado generaciones. Y no olvide dirigirse a las magníficas playas un poco más al sur para relajarse y tomar el sol. La playa de Diani es un auténtico paraíso.
Días 14 a 15 Watamu
Watamu, una zona costera virgen aún protegida del turismo de masas, es un pequeño secreto que los viajeros comparten entre sí. Descubra las magníficas playas y fondos marinos de esta sublime reserva natural.
Un magnífico hotel en Watamu
Ocean Sports Resort
Este alojamiento ofrece increíbles vistas del Océano ÍndicoPlayas de arena fina, cocoteros, pesca diaria, descanso... En Watamu, podrá disfrutar de las cosas sencillas de la vida en un entorno auténtico e íntimo, la forma perfecta de terminar su viaje al corazón de África.