Buceo en Amed

El pequeño pueblo de Amed ofrece parajes submarinos perfectos para la macrofotografía submarina. Por ejemplo, se pueden observar y fotografiar especies poco comunes como el pez pipa fantasma, el caballito de mar pigmeo y el rarísimo y fascinante pulpo mímico.

Además, debido a su proximidad con el volcán Agung, la arena de las playas de Amed es negra, lo que ofrece un contraste inusual con los coloridos corales y criaturas. Por esta razón, también se puede disfrutar de un tipo especial de buceo: el"muck dive". Esta actividad tiene lugar en aguas cuyo fondo está formado esencialmente por limo gris o arena negra. Descubrirá un entorno lunar en el que viven numerosas especies endémicas.

En cuanto a la dificultad, los buceadores principiantes lo encontrarán fácil: La mayoría de los puntos subacuáticos son poco profundos, y el mar cerca de Amed tiene una corriente muy suave y buena visibilidad (entre 15 y 25 metros).

Durante sus vacaciones de buceo en Bali, no se pierda la visita a este pecio de un carguero estadounidense, que combina una inmersión en la historia con un descubrimiento de la biodiversidad. El barco fue hundido por el ejército japonés en 1942 cuando transportaba material ferroviario para Filipinas.

La tripulación se vio obligada a abandonarlo en la playa de Tulamben, y los habitantes locales utilizaron los escombros para construir sus casas. En 1963, un terremoto provocado por la erupción del monte Agung hizo que el pecio derivara hacia el agua, donde yace a una profundidad de entre 6 y 30 metros. Desde entonces, la flora y la fauna submarinas han florecido, convirtiéndolo en uno de los pecios más atractivos y con mayor biodiversidad del mundo. Es una experiencia de buceo inolvidable.